La tercera semana del mes de diciembre continuamos con las palabras de K. Dilano. Keka es compañera de nuestra presidenta, Mar Olayo, en la compañía Iberia como Tripulante de cabina, además de ser una fantástica escritora, que firma sus libros bajo el pseudónimo K. Dilano. Como otros autores, Keka ha cedido algunos de los ejemplares de su última trilogia para conseguir fondos para la Asociación de Escritores Solidarios Cinco Palabras, que se empleará para el Proyecto de Alfabetización.
Estas fueron sus palabras:
Escamosa
Entreabierto
Hipnotiza
Escupefuegos
Volátil
El próximo 17 de diciembre, Cinco Palabras estará en el Mercadillo Solidario de AENA desde las 9:30 h. hasta las 14.30 h. Si queréis conocernos y conocer a algunos de los escritores solidarios, os esperamos en la Primera planta del Edificio de Piovera. C/ Peonías, 12.Madrid.
Una escritora de altos vuelos
Keka nació en Madrid, España en el año 1969 y actualmente trabaja como azafata de vuelo. Durante años montó adaptaciones musicales para equipos de animación en hoteles. Ha colaborado en la revista culturales de la Sierra Norte de Madrid. Cuenta con una mención honorífica de relato corto (Miami 2012). Fue finalista y seleccionada para diversas antologías de microrelatos (España 2014, 2016). En sus escritos seguido romances sexo y muerte por ser elementos fundamentales de la vida. Hasta la fecha lleva publicada las novela erótica ‘La maleta ardiente de Laura Beltrán’ (Amazon 2013), la novela romántica gay ‘El secreto de Boommarang (Amazon 2014) ‘Igoli’ (Caligrama 2017) ‘Guardianes de almas eternas’ (Caligrama 2018) que junto a Nahia (Caligrama 2018) completa la teología de la ‘Draconangelus’.
Mañana lunes 17 de diciembre Mercadillo Solidario en las oficinas de AENA
En la jornada de mañana, lunes 17 de diciembre, Cinco Palabras estaremos en el Mercadillo Solidario de AENA desde las 9:30 h. hasta las 14.30 h. Si queréis conocernos y conocer a algunos de los escritores solidarios, os esperamos en la Primera planta del Edificio de Piovera. C/ Peonías, 12. Madrid.
Como Keka, otros Escritores Solidarios han donado sus obras para el Proyecto de Alfabetización de Cinco Palabras que encontraréis en el mercadillo. Claribel Aránega, ‘El susurro del trigo’, Africa Sánchez ‘Poemas condicionados, Juan Francisco Mencía ‘69 Acertijos’, Mar Olayo ‘Las palabras mágicas de Cheles’, Victor Salgado, ‘El Rey de Ocán’, ‘Los cuentos de Andrea’...
Además podréis encontrar el juego solidario de ‘Cheles y sus dislates’, el disco solidario de la Coral Cantoría 'RADIO CANTORÍA' editado por Joaquín Torres, el Manual de Zentagle de María Pérez-Tovar y Mercedes Pérez Crespo, como las tazas, camisetas y bolígrafos de Cinco Palabras, además de otros juegos solidarios donados por HenBea.
Si queréis adquirir alguno de nuestros regalos solidarios, nos podéis escribirnos al mail de la Asociación: asociacion.cincopalabras@gmail.com
Nancys Solidarias
Tenemos que recordar que la escritora solidaria de Cinco palabras Claribel Aránega dona sus Nancys Azafatas de Colección para el Proyecto de Alfabetización de Cinco Palabras a favor de los niños de la Favela Kosmos en Johannesburgo.
Puedes conseguir estas Nancys Azafatas de Colección en el sorteo que se realizará en el CONCIERTO BENÉFICO de la Coral CANTORÍA, destinado al PROYECTO DE ALFABETIZACIÓN DE CINCO PALABRAS el 14 de enero de 2019 en el TEATRO LA LATINA, a las 20:00, entre todos los colaboradores que, con un donativo igual o superior a 10€, hayan contribuido con el Proyecto de Alfabetización de Cinco Palabras en la FAVELA KOSMOS de Johannesburgo.
*Por cada 2,50€ de donativo recibirás un número para el sorteo
*Las entradas para el concierto estarán disponibles en unos días
Escríbenos a asociacion.cincopalabras@gmail.com y te enviaremos los números del sorteo de las NANCYS AZAFATAS DE COLECCIÓN que solicites.
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Titular: CINCO PALABRAS
Asunto: SORTEO NANCYS
IBAN: ES60 1465 0100 9219 0019 2138
El número ganador se publicará en cincopalabras.com
El sorteo se realzará en el Concierto Benéfico de la Coral Cantoría en el Teatro La Latina, el 14 de enero a las 20:00
PARA ENTRAR EN MI GRANO DE ARENA:
EL PRÓLOGO DEL MES DE DICIEMBRE es de Brighid De Fez y la causa es LO VIVES MEJOR.
La historia del recortable de Cheles en HenBea
Los escritores solidarios de CINCO PALABRAS siguen las siguientes reglas:
No se cambiará género ni número de las palabras propuestas. No se modificará la posición de las mismas.
El relato tendrá una extensión de máximo 100 palabras.(*)
(*) Escribe el relato en esta WEB pinchando DEJA UN COMENTARIO (aparecerán publicados una vez sean aprobados por nuestro equipo de edición) – Al final del mes se recopilarán todos los relatos en un volumen editado en PDF, que se podrá adquirir por un donativo de 5€, destinado a cada causa del mes. Colabora con nosotros y nuestras causas.
Además, puedes colaborar para que siga creciendo el proyecto CINCO PALABRAS mediante un donativo realizando una transferencia bancaria a la cuenta corriente de la Asociación de Escritores Solidarios:
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NOTA: CINCO PALABRAS se reserva el derecho de la publicación de los relatos. Se eliminarán relatos ofensivos o insultantes hacia cualquier país, pueblo, animal o personal que puedan herir la sensibilidad del lector. Registro de la Propiedad Intelectual Nº 43388/2013 © CINCO PALABRAS. Una vez que el autor escribe su relato en ‘comentarios’, autoriza a CINCO PALABRAS a hacer comunicación pública de las obras que voluntariamente publica en nuestra página web: cincoplabras.com
Nada tienen que ver los circos actuales con los de hace unas décadas, cuando resultaba todo un acontecimiento su llegada al pueblo o ciudad, y su variante, las ferias de monstruos.
Una piel escamosa, por alguna enfermedad, te convertian en mujer serpiente u hombre lagarto, los niños buscaban cualquier toldo entreabierto intentando ver al mago que hipnotiza con la mirada,al escupefuegos, al forzudo ó al liliputiense.
Hoy todo eso nos causa horror.
Volátil que es la memoria colectiva que no quiere recordar barbaridades del pasado, pero el olvido es la semilla para repetirlas.
En el sendero que va por la estrecha vereda, hasta…nadie sabe dónde, encontré enroscada en una rama de un frondoso árbol, una serpiente de piel escamosa. Tenía un ojo entreabierto, y la cola colgando. Me quedé paralizada mirando, y casi me hipnotiza con el pequeño movimiento de la cola. De pronto y ante mis ojos, se convirtió en un ser enorme y escupefuegos. Esta apariencia tan volátil, me hizo comprender que no era más que un sueño.
De un tiempo para acá siento que mi ánimo para afrontar la vida parece estar recubierto por una piel seca y escamosa, seguramente producto de los muchos años que aguanta mi anciano cuerpo. Me levanto con dificultad del sofá y cierro las ventanas de la casa que hace poco he entreabierto y me dirijo arrastrando los pies que producen un gangueo que hipnotiza hasta entrar en la cocina. Abro el gas, pero no acerco una cerilla a los escupefuegos. Tranquila tomo asiento y espero con paciencia que el volátil ázoe invada mis pulmones y me libere de esta insufrible soledad.
En el zoo de Gran Canaria, nos dijeron que había especies de reptiles, espectaculares.
La piel ESCAMOSA, de algunos de ellos era impactante, el colorido, cada vez que se reptaba, iba cambiando de sus tonalidades. En otro habitáculo había una Pitón salía de un fondo ENTREABIERTO, cubierto de ramas. al notar nuestra presencia, se planto rígida, nos miraba, casi nos HIPNOTIZA.
En el terrário de al lado, el dragón canario, grande vistoso, muy independiente.
Es el dragón de muchas leyendas y cuentos; esos de los que ESCUPENFUEGO se mueve con rapidez.
La visita fue VOLÁTIL e interesante.
Froté mi piel con el gel bajo el agua, más bien fría, primero con suavidad, después con fuerza ¡Ay que escamosa se me está poniendo! Bajé al corral, encontré el portón entreabierto. Olvidé cerrarlo, o alguien había entrado por la noche. Sí, eras tú con la mirada que siempre me hipnotiza, tus ojos en los que me pierdo. Pero algo pasaba, no era tu mirada, no eran tus ojos, estaban furiosos, parecías una escupefuego. Y de golpe, se abrió el portón, ya no estabas, desapareció esa imagen como volátil expresión de mi miedo, de la soledad sin ti.
CON LAS MANOS EN LA MASA
Con movimientos sinuosos ensayaba su número acrobático en la barra colocada en el centro de la pista. Parecía una serpiente enfundada en el ajustado traje que moldea su cuerpo simulando una piel escamosa. Tras la cortina, desde un pequeño hueco entreabierto, un payaso observa a esa hechizante mujer que le hipnotiza haciéndole arder de deseo.
Absorto en su libidinoso juego, no vio acercarse al escupefuegos; al alimón pareja de la bella y forzudo adonis capaz de convertirle con un sólo soplido, en diminutas briznas de volátil polvo de payaso. Sin tiempo de reaccionar, esta vez ardió, pero no de deseo.
TOP SECRET
Aquella escamosa criatura se aferró al lomo del avión provocando el pánico entre los pasajeros. Los temores del Comandante se confirmaban; el manifiesto de carga especificaba un escueto “TOP SECRET”.
El ordenador de cabina mostraba que el alado visitante había conseguido dejar entreabierto el compartimento de bodega donde viajaban enjaulados sus dos retoños.
– ¡Nos hipnotiza el escupefuegos! –gritó el copiloto al controlador aéreo.
Aterrizamos de emergencia en el Valle de la Luna del desierto de Atacama. Mientras la radiobaliza emitía su volátil SOS, pudimos contemplar las siluetas de tres dragones atravesando el espectacular aro lunar que coronaba el horizonte.
Ahí está, como todos los días, con esa piel verde y ESCAMOSA. Se acerca desde el portón ENTREABIERTO de mi huertecillo de fresas. Sus ojos me miran con ese color amarillo que siempre me HIPNOTIZA. Creo que al final sí voy a ponerla nombre, puedo llamarla ESCUPEFUEGOS porque después de comerse mis fresas saca su lengua teñida de ese rojo parecido al fuego y parece reírse de mi por esa otra fresa que no podré degustar yo. Acabado su postre mi VOLATIL amiga vuelve a desaparecer dejando tras ella un surco, como indicio reafirmante de su presencia.
Ella era bella, aunque realmente extraña, no de belleza clásica sino… de piel escamosa y ojos rojizos, la mujer lagarto subió la cremallera de su traje entreabierto y dijo: No me miréis así, ¿es que no sabéis que muerdo?”
“Sé que tu mirada viperina me hipnotiza” contestó el artista escupefuegos.
El hombre bala dijo: “Yo la vi primero, volaría a donde fuera por ella”
“¡Ay, el amor de circo es volátil, amigos, aparece y desaparece jeje!” añadió el hombre invisible.
La mujer lagarto antes de salir a la pista se giró y les lanzó un cálido beso de venenoso…
¡Amor!
Copos de fuego en la piel ESCAMOSA
se deslizan a la búsqueda del Ser.
He ENTREABIERTO las rendijas de mi cuerpo,
las grietas de mi alma,
llenándome de ti.
Tú, reflejo de mi mirada HIPNÓTICA,
brumosa, perdida, ansiosa…
Tú, ESCUPEFUEGOS de palabras,
pompa de jabón limpiando mi alma.
Y yo…corpúsculo VOLÁTIL,
brisa de las mañanas,
el rocío en tu cara.
Tormenta de mujer.
Mujer soñada.-
Adiós pasado inmerecido de episodios sórdidos cada lagrima de rabia, dolor adorna tu crucifijo. De tu maldición escamosa me desprendo, de tu piel y tormento envenenado me retiro. He entreabierto mi futuro, cada momento asimilado la esperanza me hipnotiza, la vida me hace amar. Recibo un escupefuego de bendiciones infinitas al que doy gracias constantes mientras la salud lo permita. Mi emoción esta volàtil mi alegría a punto de explotar pido a la vida me cubra, pido a Dios años, muchos años para poderlo contar.
¿Mago o aprendiz de equilibrista?
Muestra la tela escamosa de su capa,
lee el libro entreabierto, busca el truco.
Con los ojos cerrados, en su hamaca,
hipnotiza a sus miedos de la infancia:
A las flores, sus espinas, su fragancia,
al monstruo, al payaso, al mameluco,
a los escupefuegos y hasta al rastro
que deja tras de sí cuando camina.
Sobre todo a esa huella tan volátil
que una brisa liviana borra, esfuma,
convirtiéndola, así, en simple bruma,
acróbata sin red, voz danzarina…
Bien se podría denominar como escamosa a esta temporada, en el camino todo se encuentra entreabierto, salvo el significado de la palabra hipnotiza que por no buscarla, a estas horas, simplemente la utilizo.
De igual manera que las dos palabras siguientes: Escupefuegos y Volátil, dos palabras que seguro que conociendo su significado me hubiera sido de utilidad para mejorar mi redacción y así alcanzar las cien palabras del relato de la semana.
Un nuevo relato que se ha tenido que retrasar cuatro días para ser creado, debido a que el tiempo me ha robado las suficientes horas para mi creatividad.
Porfirio
Tiene la piel escamosa, por la soriasis que le coge todo el cuerpo. Con su único ojo, entreabierto, el otro lo tiene huero, cuando te mira de frente casi te hipnotiza. Dicen que los animales le entienden y que fue escupefuegos en un circo y que recorrió medio mundo. Se llama Porfirio y habla poco, pero a mí me tiene afición, quizá porque, todos los días, le pongo unas monedas.
Un cartel colgado a su cuello reza: “No ser bolátil y colabora”. Es casi una orden, y a mí me da la risa. Ha escrito volátil con b y acento aposta.
CUESTIÓN DE PIEL
Sé que mi piel es diferente a la de los demás; es ESCAMOSA, pero cuando miré el informe ENTREABIERTO de aquel médico pude leer que mi enfermedad no era contagiosa.
Aquí soy feliz, María HIPNOTIZA con su mirada ¡es tan hermosa! que con mirarle a los ojos te olvidas de su espesa barba.
También soy amigo del ESCUPEFUEGOS, pues cada vez que quiero encender un cigarrillo solo tengo que acercarme a él.
Ahí fuera la gente es muy VOLÁTIL, y quizás por eso mis padres al no soportar que fuese diferente, me abandonaron aquella Navidad cuando me llevaron al circo.
Desde que llegó a este mundo su destino, inmisericorde con ella, hizo que desarrollara una protección contra todo lo externo, como una piel escamosa a modo de escudo.
Sin embargo ella no es lo que aparenta; tiene un corazón, permanentemente entreabierto para iluminarnos con su luz interior o para que podamos entrar y envolvernos en su amor, tan sincero y entregado que hipnotiza, tan ardiente como las llamas de un escupefuegos.
A su lado todo aquello que nos impide manifestar abiertamente lo que somos se convierte en material volátil y sólo entonces queda lo mejor de cada uno.
EL LAGARTO
Me acerqué sigilosa hacia las jaulas de las fieras. Noté que el corazón me palpitaba con fuerza, pero no desistí de mi propósito. Necesitaba ver el lagarto de piel escamosa con mis propios ojos. Dijeron que era algo extraordinario y que no debía perdérmelo si venía al circo. Así que allí estaba yo, frente al bicho, cuya piel relucía por el sol y que me miraba fijamente con un ojo entreabierto.
De pronto, se acercaron el señor que hipnotiza y el escupefuegos y empezaron a reñirme: niña, aquí no puedes estar, me gritaron.
Yo salí corriendo cual volátil paloma
REGRESIÓN
Mientras permanece sentada tras el ventanal, el sol acaricia su escamosa y blanquecina piel ajada por el tiempo. El visillo entreabierto por el viento, le permite observar el vuelo de los pájaros que la hipnotiza. Su pensamiento surca el cielo junto a ellos perdiéndose más allá del horizonte. Su boca de dragón escupefuegos se apagó, y ahora, solo lanza palabras llenas de cariño. Su volátil memoria la traslada a la infancia, donde solo desea que, como ayer, su padre vuelva a cogerla de la mano.
PASAR EL DUELO
A la par que la juzgan
esconde las lágrimas,
no han de llorar sus ojos
por las palabras,
más tristes son los hechos,
sus artimañas,
esconden la mirada
quienes hablan,
y ella, con la felicidad perdida,
esconde también su alma,
en una escamosa piel,
de una boca ya cerrada
para la risa.
Le queda un corazón
apenas entreabierto,
nada receptivo a la esperanza,
su mente, yace herida,
moribunda, hipnotizada.
Como sustento
de un mañana,
podría , rehacerse al alba,
quemando con un escupefuegos,
el dolor residual
que aún quedara,y,
pasar el duelo,
en la volátil fortaleza
de sus entrañas.
Barbo para cenar
Áspera, incongruente, desabrida en su relación, como la ESCAMOSA piel del barbo que su marido trae cada día para cenar. ¡Siempre los mismo! ¿Estaban condenados a subsistir con el sencillo pescado que hasta parecía se dejaba pescar?
Con un ojo cerrado, el otro ENTREABIERTO, agonizante en la bandeja, esperando su final, el pescado IPNOTIZA a la mujer. No puede cocinarlo; enfurecida, lanza al pescador exabruptos incendiarios emulando al ESCUPEFUEGOS del circo.
Él, VOLÁTIL por naturaleza, la mira, sonríe y le promete cazar una avecilla, la próxima vez.
Por favor, anular la anterior entrada. Gracias.
Barbo para cenar
Áspera, incongruente, desabrida en su relación, como la ESCAMOSA piel del barbo que su marido trae cada día para cenar. ¡Siempre los mismo! ¿Estaban condenados a subsistir con el sencillo pescado que hasta parecía se dejaba pescar?
Con un ojo cerrado, el otro ENTREABIERTO, agonizante en la bandeja, esperando su final, el pescado HIPNOTIZA a la mujer. No puede cocinarlo; enfurecida, lanza al pescador exabruptos incendiarios emulando al ESCUPEFUEGOS del circo.
Él, VOLÁTIL por naturaleza, la mira, sonríe y le promete cazar una avecilla, la próxima vez.
Si te vas, nada es igual pero todo sigue igual – 12
ESCAMOSA diatriba para algunos esa de cómo ponerse en paz con uno mismo, para los que se hacen planteamientos existenciales pero no para Lambreta, y menos aún cuando se encuentra en uno de esos momentos transcendentales de su cuelgue, con el ojo derecho ENTREABIERTO para que no le entre el humo del cigarrillo que lo HIPNOTIZA mientras su boca semeja la chimenea de un volcán ESCUPEFUEGOS y su pensamiento vaga, divaga, viaja, regresa y vuelve a marcharse de una idea a otra, de un sentimiento a otro, VOLÁTIL escaparate de futuro incierto… Quiero ver a Esther.
Si alguien desea leer la historia completa, puede hacerlo aquí: https://eldoblaodelarte.wordpress.com/tag/lambreta/
Los pecados capitales
LAXUS (Parte II)
Laxus sentía su piel escamosa cuando, entrando en el aula, se transformaba en el depredador que odiaba ser. Luchaba, denodadamente, para controlar el deseo sexual hacia sus alumnas, su erección ante un escote entreabierto, una mirada curiosa que hipnotiza, una mente despierta. Odiaba a esas malditas e insensatas estudiantes que no le permitían centrar su atención en la docencia, convirtiéndole en un escupefuegos volátil capaz de acabar con sus vidas.
Dejó su carpeta sobre la mesa y se dirigió al encerado, dejando caer el borrador al suelo, esperando que llegara la primera víctima a recogerlo. Ahí estaba…