ESCRIBE TU RELATO DE DICIEMBRE (IV): FELICITACIÓN DE NAVIDAD

En la cuarta semana del mes de diciembre, aprovechamos, hoy día de Nochebuena, para felicitaros estas fechas tan especiales, con nuestro último concierto solidario que la  Coral Cantoría celebró el pasado día 21 de diciembre en el teatro Capitol de la Gran Vía en la capital de España, ‘Luces de Navidad’, y dedicó a todos los Escritores Solidarios de Cinco Palabras.

Este mes, nuestra Asociación ha recibido mucho apoyo, desde el proyecto de Robert Muro, que nos ha dedica el Kit de Supervivencia de ElMuro, a la colaboración de la Escuela de Policía Nacional a través de su Lotería de Navidad y del empeño de José Joaquín Gomá. Así como la Coral Cantoría, que con su director Clemente Magán y todo su elenco de artistas, nos ha dedicado su concierto Luces de Navidad.

Por todo ello y todo lo bueno que nos ha pasado el 2017, damos gracias a todas las personas que siguen a nuestro lado en este proyecto solidario y nos ayudan hacer un mundo más digno para todos a través del Arte.

"Queremos mandaros nuestros mejores deseos para el Año Nuevo 2018 y desearos unas Felices Fiestas de Navidad... con la música de la Coral Cantoría"

Esta semana las palabras nos llegan desde el cine Capitol de la Gran Vía  de la mano del director de la coral Román Clemente Magán y los músicos de Mirly Tonk Band Olegario, Jesús y Luis...

Villancicos
París
Novia
Cuento
Trineo

Éste es el relato que ha escrito la presidenta de Cinco Palabras, Mar Olayo, para felicitaros estas entrañables fiestas con las Cinco Palabras de ésta semana:

"Vive la Navidad desde la magia que hay en ti. Escribe tus propios villancicos, construye tu propia zambomba de mazapán. Deja que tu imaginación vuele a París, lregrese con las maletas ligeras y el alma llena de amor, como el de una novia que camina al altar.
Haz de tu vida el mejor cuento más bello y cuando tengas dudas, llámame; te subiré a mi trineo para que nunca dejes de soñar".

La causa del último mes del año en Cinco Palabras está dedicada a los niños más necesitados: Ningún Peque Sin DesayunoInés García de Paco, es una azafata de vuelo que primero fundó la Asociación Menuda Vida de Perros dedicada a la ayuda de animales abandonados. Posteriormente, debido a la crisis que sufre España, creó otro proyecto dedicado a ayudar a familias desfavorecidas con niños pequeños o enfermos y a personas solas y sin recursos, a este proyecto lo llamó Ningún Peque Sin Desayuno.

Prólogo por el director del Coro Cantoría , Román Clemente Magán, que el pasado 21 de diciembre actuaron en el teatro Capitol de Madrid, España con el espectáculo Luces de Navidad.

(*) Escribe el relato en esta PÁGINA pinchando DEJA UN COMENTARIO (aparecerán publicados una vez sean aprobados por nuestro equipo de edición) – Al final del mes se recopilarán todos los relatos en un volumen editado en PDF, que se podrá adquirir por un donativo de 5€, destinado a cada causa del mes. Colabora con nosotros y nuestras causas.

Además, puedes colaborar para que siga creciendo el proyecto CINCO PALABRAS mediante un donativo realizando una transferencia bancaria a la cuenta corriente de la Asociación de Escritores Solidarios:

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35 comentarios sobre “ESCRIBE TU RELATO DE DICIEMBRE (IV): FELICITACIÓN DE NAVIDAD”

  1. Vive la Navidad desde la magia que hay en ti. Escribe tus propios villancicos, construye tu propia zambomba de mazapán. Deja que tu imaginación vuele a París, regrese con las maletas ligeras y el alma llena de amor, como el de una novia que camina al altar.
    Haz de tu vida el mejor cuento más bello y cuando tengas dudas, llámame; te subiré a mi trineo para que nunca dejes de soña

  2. ¡Feliz navidad amigos de cinco palabras solidarias!

    Sonreíd amigos, que ya llegó la navidad, que suenen ya los cascabeles, que es hora de alegrar los corazones, de cantar alegres Villancicos y hacer que vuele nuestra fantasía. Imaginaos París, totalmente nevado, a una Novia, (podría ser la tuya, una hermana o una hija) viviendo un maravilloso Cuento de príncipes y princesas, montada en un Trineo tirado por siete fantásticos renos (en lugar de blancos corceles). Cantad, conmigo, cantad ¡que viva la cordura, el amor, la paz, la felicidad y la navidad! ¡Feliz nochebuena a todos y tened una felicísima navidad y un próspero y feliz año nuevo 2018!

  3. Villancicos suenan en todos los rincones y los enamorados pasean de la mano, ¡París en sus corazones! Oh, novia que besas la mejilla de tu chico y chico que susurras el más bello cuento a tu amada, en esta dulce, mágica y estrellada noche que os corona. ¡Mirad!… Baja por la empinada cuesta un hombre en un trineo dorado repartiendo regalos de Navidad, alguien se los dio, allá, en la cima, donde hay una fábrica secreta que nadie vio pero todos dicen que se enciende en estas fechas y siempre reparte alegría. Se encienden las luces.
    ¡Empieza la fiesta!

  4. ¿Dónde están esos niños que….. entran por la puerta, cantando los villancicos, con las gargantas frías, oliendo un buen chocolate caliente?
    Cerrando los ojos, y viéndose en Disneyland Paris, de la mano de Wendy y Peter Pan, volando por el cielo, inocente, como novia de cuento, que regresa por una ventana, donde tiene su morada cada año.
    Con la ilusión de patinar sobre hielo, montar en trineo, poner agua a los camellos, o abrir los regalos bajo el árbol… volved, volved, un año más, que ya es Navidad.

  5. Disfrutemos de estos días en los que los sentimientos se intensifican, sobre todo cuando escuchamos los primeros villancicos.
    París y Helena no se dieron tanto amor como el que ofrecemos en estas fechas tan emotivas a los presentes y a los ausentes; llenos de deseos de felicidad, como la de la novia que camina hacia el altar, con la esperanza de que el final de su cuento sea un “…y comieron perdices” o la ilusión del niño que, mirando al cielo, espera ver cruzar un trineo.
    Estéis dónde estéis disfrutad de las fiestas. Os deseo una muy Feliz Navidad.

  6. Descontento

    Tuve miedo a caer, no volé, me agarré y me arrepiento.
    Haber visto París o New York, no me reconcilia.
    Procurando engañarme, aparenté ser un hombre contento.
    Canté villancicos y hasta creí disfrutar en familia.
    Tuve sólo un amor, y al final fue una novia de cuento.
    No aprecié nunca nada, y aun así fui motivo de envidia.
    Hoy burlo al descontento, con sueños de vidas inventadas,
    como un trineo en jardín escarchado, sabiendo que no hay vuelta.
    Desastrado castillo de arena, vencido por aguas saladas.
    Y acabaré como acaba la rosa, cuando dobla, ya muerta.

  7. Después de cantar VILLANCICOS de Navidad en mi vuelo a PARIS con la tripulación y pasajeros, a una NOVIA que iba sentada en Business le conté lo que no era un CUENTO….. Que voy a pedir prestado el TRINEO a Papá Noel y me voy a ir de Iberia con un ERE, ¡bien merecido!
    Último vuelo, dia de Navidad, regalito de Papá Noel🎄

  8. Semejanzas navideñas
    ¿Cantamos villancicos como cuando teníamos seis años y sabíamos que cantar nos daría, siempre, calma?
    No pedíamos viajes a París, ni un vestido de novia bordado en pedrería, ni joyas, ni palacios… jugábamos con muñecas que eran dichosas con poco (¡con tanto!) como cada una lo es ahora: una familia, un trabajo que amamos, la risa compartida con quienes escribimos el cuento cotidiano… historias muy sencillas pero mágicas, que incluyen hadas, duendes, compromiso, milagros.
    Quizá, de niñas, ambas soñábamos con un trineo que traía palabras -cinco- de regalo, para inventar canciones y obsequiarlas.
    Todavía lo hacemos, desde entonces.

  9. Cheles estaba canturreando unos villancicos cuando mamita Mar entró en el dormitorio.
    -¡Te pillé!
    -¡Me has asustado! ¿Cuándo has llegado?
    -Esta mañana, de París.
    -Y ¿qué hacías allí?
    -Estaba en la boda de un amigo.
    -Y ¿la novia era guapa?
    -Muy guapa, y llevaba un vestido de cuento de Hadas.
    -¡Nunca me llevas a las bodas mamita!
    -Porque son aburridas. Pero mañana pienso llevarte a Cercedilla, con el trineo.
    -¡Siiií! ¡A jugar con la nieve!
    -Guerra de bolas.
    -¡Y muñeco de nieve!
    -¡Zanahoria, botones y granos de café!
    -¡Amo la Navidad, mamita!
    -Pues sigue cantando.
    -¡Oh, blanca Navidad, nieva …!

  10. La jornada laboral del día de noche buena había terminado, de camino hacia casa, escuche música de Navidad. Estando tan lejos del hogar oír villancicos, era como estar en casa estando en París. Me sentía tan sólo, el móvil sonó, era un WhatsApp de mi novia, deseándome una feliz Navidad y me escribió otro preciso cuento, como cada Navidad.

    Este año era la historia de un hermoso trineo, construido para un Santa Claus, muy especial que su solidaridad con los más necesitados era su mayor prioridad, sus mejores regalos eran para ellos y los repartía con su duende más fiel

  11. Recuerdo cuando cantábamos villancicos debajo del árbol de Navidad en casa de la abuela. Yo todavía no había ido a París, ni había tenido novia. Mi vida era un cuento por escribir y toda mi mente y mi corazón estaban en ese momento concentrados en la imagen de Papá Noel descendiendo en trineo por la montaña cargado de regalos.

  12. LA NAVIDAD
    Cómo se añoran aquellos años donde los villancicos eran la única música que se oía por las calles Todavía no existía la televisión, ni apenas nada de lo que hoy tenemos. Parecía que el frio era mayor y viajar a París, una utopía. Yo, una novia adolescente, soñaba con el cuento del mundo feliz.: sin guerras, sin catástrofes, sin violencia, sin oscuridad… montaba en un trineo tirado por renos —eran pura fantasía— para acercarme a las estrellas y desde allí contemplar esa luz y esa felicidad que todos los hombres de bien, desean en estas fechas. De pronto, desperté

  13. Es un viejo cascarrabias que odia los villancicos y todo lo relacionado con la infancia. Le molesta que le pidan el aguinaldo, que le feliciten las fiestas, hasta que le cuenten cómo se celebran en París o el círculo polar ártico. Hace poco se ha echado una novia. La ha conocido en el hogar del jubilado. Es regordeta y tiene una preciosa melena blanca ensortijada. Casi siempre va de rojo como esos duendes de cuento. Por Nochebuena la mujer aparece montada en un hermoso trineo y le invita a dar una vuelta por los tejados de la ciudad. ¡Vaya sorpresa!

  14. Decía un viejo reportero de guerra que es más fácil escapar indemne de un bombardeo que huir de los recuerdos. Los villancicos tienen ese poder evocador de las grandes efemérides o las peores tragedias.
    Los creyentes celebramos la Navidad pero lloramos igualmente a los Santos Inocentes asesinados por Herodes.
    París, ciudad del amor, también fue novia de la guillotina y escenario de LOS MISERABLES de Víctor Hugo.
    Relaten, sin complejos, el cuento de Noel y su trineo volador, pero perseveren en sus buenos propósitos de Año Nuevo.
    Ayudemos al Niño Dios a hacer realidad su sueño construyendo un mundo bello.

  15. Siempre recordaré con cariño aquella ciudad, cuando recorria sus calles de la mano de Lucía. Siempre por navidades, la magia de la navidad adorna a algunas personas y en ella lucía aún más . ¡Qué maravilla escuchar aquellas gentes alegres cantando villancicos! Aquella maravillosa ciudad que nos acogió: Paris, la ciudad de la luz. Ahora ya no es lo mismo. Ahora paseo solo. Siempre echaré de menos a mi novia porque era de cuento. Demasiado perfecta para mí. Un día, Dios decidió llevársela a su lado.
    Siempre recordaré nuestra infancia. ¡Qué bien lo pasábamos con el trineo.
    Siempre te querré, Lucía

  16. VILLACICOS PARIS NOVIA CUENTO TRINEO

    Viajamos a Francia en coche, mi novio y yo, escuchando VILLANCICOS. En PARIS nos casamos. Mi vestido de NOVIA de tul azul, ramo de flor de pascua y muérdago, típico de esta estación.
    Nevaba copiosamente. En el Sena se reflejaba las luces de barcos flotantes y las luces de Navidad de la ciudad. Parecía una imagen sacada de un CUENTO.
    Paseamos en TRINEO, tirado por seis renos de generosa cornamenta y en sus lomos se agitaban cascabeles que resonaban.
    Subimos a lo mas alto de a la Torre Eiffel, para contemplar la nevada y ver el manto blanco que cubría el asfalto.

  17. Decía un viejo reportero de guerra que es más fácil escapar indemne de un bombardeo que huir de los recuerdos. Los villancicos tienen ese poder evocador de las grandes efemérides o las peores tragedias.
    Los creyentes celebramos la Navidad pero lloramos igualmente a los Santos Inocentes asesinados por Herodes.
    París, ciudad del amor, también fue novia de la guillotina y escenario de LOS MISERABLES de Víctor Hugo.
    Relaten, sin complejos, el cuento de Noel y su trineo volador, pero perseveren en sus buenos propósitos de Año Nuevo.
    Ayudemos al Niño Dios a hacer realidad su sueño construyendo un mundo bello.

  18. El gramófono escupía sin cesar música de villancicos y París, bajo las luces de Navidad, era una fiesta, pero no la suya.
    El vestido de novia de princesa de cuento pendía de la percha. Realmente, ella era una princesa, pero su vida distaba mucho de ser un cuento de hadas.
    Obligada por su condición, sometida siempre al protocolo, añoraba, aun sin conocerla, la libertad; ese sentimiento del que le hablaba Goran en sus cibernéticos encuentros clandestinos.
    En aquellos momentos sentía cómo su vida, cual trineo sobre la nieve, se deslizaba imparable hacia la infelicidad.
    Sopesaba la probabilidad (¿imposible?) de huir.

  19. ¡SORPRESA!

    Aquellos villancicos agobiaban. Resultaba imposible escapar de la Navidad, estaba en todas partes: en los adornos, en las calles repletas de gente y en las luces de colores que iluminaban la ciudad.

    Me invadía la tristeza desde mi último viaje a París. Deseaba sorprender a mi novia, estudiante de Erasmus, pero, cuando la encontré en brazos de otro, el sorprendido fui yo.

    Lo que había sido un cuento de hadas se tornó en una terrible pesadilla. Con el corazón, hecho pedazos, me deslizaba sobre un trineo hacia el abismo.

    Remonté el vuelo durante el descenso, al descubrir que disponía de alas para volar.

  20. Por fin ha llegado la Navidad. Momentos de recuerdos y añoranzas, momentos que evocan la niñez llena de turrones, mazapán y villancicos….mientras soñábamos que nos tocará la lotería para irnos a París.
    Y allí como una novia de cuento de hadas volar hasta la torre Eiffel,
    Desde alli subiendo y bajando en trineo viendo la luna y soñando con ir a ella…..

  21. Cantares
    Dicen que no son villancicos, que son coplillas soeces las que cantamos por Pascuas, pero son divertidas, menos para Marie. Vino de París, al pueblo, en unas Navidades, hace no sé cuanto tiempo. A alguno le hacía tilín. Delgada y lánguida, tenía el pelo trigueño y era dulce, pero cuando le cantamos “Mi novia tiene una huerta/ y yo soy el hortelano…” y “Si quieres un pepino/ sal a la puerta…” le sentó tan mal que nos espetó una retahíla sin cuento que explotó en:
    -¡Mieeeeeeerda, cochons!
    Como le dijo “El Lila”:
    -Es mejor el trineo del Noé ese ¿verdad?. Y hemos entendido lo de collons, que eres “mu” finústica tú.

  22. MAMÁ ¿DÓNDE ESTÁS?

    Otro sábado, lo único diferente a los demás son los villancicos que suenan de fondo. Ella está como siempre con su mirada perdida y repitiendo la misma canción: “Estuve en París vestida de novia con él”.
    Me siento a su lado, cojo sus manos y le cuento cosas de la vida normal. Intento rescatarla de su mundo. Pero su mente es como un trineo deslizándose a toda velocidad hacia el olvido. De repente me mira, sonríe, parece que ha vuelto. Le pregunto: Mamá ¿sabes quién soy?
    —Sí, mi madre.
    Solo puedo besarla y, contemplando la sonrisa de su mirada, seguir soñando con su regreso.

    1. Santiago IV

      Odiaba los villancicos, aunque recordaba, nostálgico, las misas del gallo, en el pueblo, en las que los cantaba con otros niños. Había estado en París unos días, con Julia, y volvió harto de parafernalias navideñas. Julia… siempre Julia. Su madre se empeñó en que fuera su novia, pero, cuando se casaron, las relaciones entre las dos se torcieron y su matrimonio de cuento devino en una continua lucha entre ellas, y él, en medio. Al final, terminó pasando.
      -Santiago, ayúdame a colocar el trineo de Papa Nöel en el árbol- le requirió Julia.
      – ¡A la mierda!- rezongó Santiago, sin contestar ni moverse del sillón.

  23. LA NAVIDAD EN PARÍS … TAMBIÉN PASARÁ

    Villancicos acunan las calles
    de la hermosa capital del Sena.
    París luce
    como la novia engalanada
    de un cuento de hadas.

    Niños patinan gozosos
    sobre el hielo
    girando entorno a un trineo.
    Todo era tan mágico,
    que hubiera querido
    detenerse para siempre
    en ese instante.

    Hacer como si nada malo
    pudiera pasar.
    Como si esa Navidad,
    no fuese a terminar nunca.
    Como si su luz,
    jamás se dejase apagar.
    Y cerró los ojos
    grabando esa imagen
    entre sus últimos recuerdos.

    Unos copos de nieve
    tocaron su cara.
    Su tiempo,
    y el de esa Navidad
    estaban escritos.
    Aceptó… y sintió paz.

  24. resuenan los villancicos. Ya ha llegado el invierno y con él la Navidad. Momentos que hacen recordar, esbozando sonrisas o derramando lágrimas.
    Los rezos se intercambian para dar gracias por lo que tienen.
    Como late el corazón de un pintor en París, late su corazón al jugar con su pequeño.
    Su reciente novia y madre del niño observa en silencio, comprobando que el amor y el desamor pueden estar en la misma habitación.
    Las navidades pasadas tampoco fueron un cuento de hadas, pero ahora realmente parece que el trineo del amor se quedó sin canes.

  25. MAGIA NAVIDEÑA

    Las miradas infantiles
    todas, de villancicos llenas,
    a mí corazón regalan
    el amor que me sustenta.

    De París a Filadelfia
    de los mares a la estepa,
    los niños siguen cantando
    con felicidad inmensa.

    Y novia de todos ellos
    me siento en el universo,
    estrella con luz intensa
    princesa de un bello cuento.

    De fiesta toda la tierra
    estrellas en todo el cielo,
    los niños cantan que llega
    la Navidad en trineo.

    Niños y Navidad,
    ilusión y nuevos sueños,
    es magia esperanzadora,
    es el amor renaciendo.

  26. Oíamos villancicos después de la cena de navidad y a alguien se le ocurrió el juego de contar historias.
    Ahí va la mía:
    Estabamos en París, en un dia luminoso de invierno,decidimos ir al Museo D’orsey a disfrutar de Cezanne y Renoir.
    Al traspasar la puerta…nos encontramos en una antigua estación de tren.
    En medio de un andén vimos a una novia que corría para subirse a un tren.
    Todo parecía un cuento romántico pues a lo lejos pudimos ver un precioso trineo, con un novio desesperado en busca de su amor.

  27. DE ENSUEÑO
    Se aproximaban las fechas y los preparativos del ayuntamiento llegaban a su fin. En pocos días el ambiente se volvería festivo y con el runrún de los VILLANCICOS los ciudadanos acudirían a comprar sus viandas con el ritmo navideño de costumbre.
    María había decidido alejarse de tanta algarabía y se fue a PARIS para elegir y encargar su vestido de NOVIA. En pocos meses contraería feliz matrimonio con el joven más potentado de la ciudad.
    El dependiente la introdujo en un CUENTO de fantasía para elegirlo y terminaron deslizándose en un TRINEO por las escaleras mecánicas de El Corte Inglés.

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